Periodista de profesión, pero más por vocación, es una de las caras más reconocibles y fiables de la televisión pública de Galicia. Apenas con 16 años se inició en la tarea de hablar delante de un micrófono. Fue en la ya extinta Radio Noroeste. Luego, el ojo avizor de un directivo de la Radio Galega hizo que lo contrataran y comenzó su andadura en la compañía, hasta el día de hoy. Con cuatro décadas de labor en el ente público en su mochila, este ponteareano tuvo tiempo para colaborar periodísticamente con Atlántico Diario con crónicas que revelaban su gran pasión: el deporte. Y tanto fue así que fue jefe de Deportes de Radio Galega del 2005 al 2009. Pero es tanto su bagaje profesional que sería interminable historiar su labor en acontecimientos deportivos de orden mundial. Sólo por apuntar algunos, mencionar su labor en las Eurocopas de fútbol del 2000 y 2004 o su relato presencial de los Giros, Tours y Vueltas a España en varias ocasiones. Gran animador, dueño de un humor fino y siempre dispuesto a aventuras, también participó en películas como “La sombra de la Ley” y la exitosa “Cuñados”. Afable e impecable en sus crónicas televisivas, reconoce que su mayor éxito es que “me lo he pasado toda mi vida de maravilla; por eso soy un privilegiado, y porque no tengo ni nunca tendré redes sociales”, afirma con una ironía tan natural como sus gustos a la hora del comer, beber y viajar.

¿Cuál es el primer viaje que hiciste por tu cuenta?

Una locura de adolescencia e irresponsabilidad. A Cádiz en una Vespa 125.

¿Qué es lo primero que compruebas cuando entras en la habitación de un hotel?

La bañera, por si hay opción de chorros.

¿Cuál es tu viaje soñado?

Ir a Australia.

¿Cuál es el souvenir más insólito que compraste alguna vez? 

Sin duda, unas bermudas rojas que compré en Italia exageradamente llamativas para la época, en 1989.

¿Con qué personaje darías la vuelta al mundo en 80 días?

Me hubiese gustado hacerla con mi padre. Mi ídolo.

Tu peor recuerdo de un viaje es…

Soy un enamorado de Italia y me había enamorado de una italiana, pero nuestra historia era imposible, y por eso la vuelta a casa fue dura.

¿Qué es lo más extraño que has comido en un viaje?

Fue en República Dominicana. Ni pregunté qué era aquello, pero podían ser insectos.

¿Cuál es tu trago preferido y el mejor momento para tomarlo?

Un vermouth rojo al mediodía o un vino tinto antes de cenar con amigos.

¿Qué menú hubieses puesto en la Última Cena?

Fabes con almejas y arroz con lubrigante.

Confiésanos… ¿cuál es tu vicio gastronómico?

Tengo varios. Los dulces, aunque tuve que dejarlos, especialmente todo lo que lleve crema pastelera. El chocolate con almendras, de los mejores inventos de la humanidad. Ah, y los arroces.

Cuando tienes invitados en casa ¿con qué plato triunfas?

En la cocina, soy muy básico, y torpe. Por lo general, traigo la comida de algún restaurante cercano. Aseguro un buen vino; y como tengo amigos que lo hacen de maravilla, pongo la casa y los chistes.