Budiño es uno de los grandes exponentes de la cultura gallega contemporánea. Con una visión artística única, ha logrado fusionar la tradición de la música de raíz gallega con la vanguardia de la electrónica, creando un estilo propio que lo ha llevado a escenarios de más de 25 países. Viajero incansable y soñador de melodías imposibles, ha construido una carrera marcada por la calidad y la experimentación desde el lanzamiento de su primer álbum, Paralaia (1997). A lo largo de los años, ha recibido numerosos reconocimientos, como los Premios Opinión y la Vieira de Honor a la calidad artística. Actualmente, el artista moañés sigue explorando nuevos horizontes con una gira basada en su último trabajo discográfico, Branca Vela (2023), abriendo así un nuevo capítulo en su evolución musical.

¿Cuál es el primer viaje que hiciste por tu cuenta?

A Dublín, un viaje muy especial para conocer la escena musical del país.

¿Qué es lo primero que compruebas cuando entras en la habitación de un hotel?

El colchón.

¿Cuál es tu viaje soñado?

Machu Picchu (Perú). 

Si te perdiesen la maleta, ¿qué es lo que más echarías de menos?

Mi neceser con mis ciento cincuenta cremas. Por cierto, desde aquí le reclamo a Iberia una

maleta perdida desde hace un año en un Santiago-Bilbao, que no aparece. 

¿Cuál es el souvenir más insólito que compraste alguna vez?

Una bufanda de pelo de camello en Damasco, así me la vendieron.

¿Con qué personaje darías la vuelta al mundo en 80 días?

Con Uxía, la compañera de viaje más divertida que puedas encontrar.

Tu peor recuerdo de un viaje es…

La tristeza del día de vuelta de mi primer viaje, con 15 años, a Lorient (Bretaña Francesa)

¿Qué es lo más extraño que has comido en un viaje?

Pues lo más extraño, y a la vez bastante tópico, fueron saltamontes y todo tipo de insectos en

Teotihuacán (Ciudad de México).

¿Cuál es tu trago preferido y el mejor momento para tomarlo?

LK (Licor café) en el día del Carmen da Illa de Arousa.

¿Qué menú hubieses puesto en la Útima Cena?

Tortilla, pulpo y empanada, el trío gastronómico perfecto.

Confiésanos… ¿cuál es tu vicio gastronómico?

Chocolate (dulce), jamón ibérico (salado).

Cuando tienes invitados en casa ¿con qué plato triunfas?

Rape rebozado y ensaladilla de langostinos, mis especialidades.